Reciclaje de cables eléctricos: Porque hasta el último hilo de cobre tiene una historia que contar

¿Alguna vez te has preguntado qué pasa con los cables cuando dejan de servir? ¿Esos que se acumulan en cajones, se desechan tras una obra o se tiran sin más, como si ya no valieran nada?.

Lo cierto es que los cables eléctricos —especialmente los de cobre y aluminio— no solo son reciclables, son auténticos tesoros escondidos. Y darles una segunda vida no solo es una cuestión de sostenibilidad, sino también de economía, conciencia y responsabilidad.

Por qué el reciclaje de cables eléctricos importa (y mucho)

Conservamos recursos que no son infinitos

El cobre y el aluminio son materiales valiosos. Reciclarlos significa evitar su extracción, una actividad costosa, contaminante y muchas veces agresiva con los ecosistemas.

Reducimos la cantidad de residuos en vertederos

¿Sabías que muchos cables acaban donde no deben? En contenedores comunes, mezclados con otros desechos. Y eso tiene un precio ambiental altísimo.

Impulsamos la economía circular

Cada cable reciclado es una oportunidad para reinsertar materiales útiles en la cadena productiva. Menos basura, más oportunidades.

Creamos empleo local

Sí, reciclar también genera trabajo. Desde la recogida hasta la transformación final, el reciclaje mueve una red de profesionales comprometidos.

¿Cómo se reciclan los cables eléctricos?

Reciclar un cable no es simplemente desecharlo. Es todo un proceso técnico que separa con precisión lo valioso de lo que no lo es. Veamos cómo funciona:

1. Recolección

  • En puntos limpios
  • Centros de reciclaje
  • Chatarrerías de confianza
  • Programas específicos para empresas

2. Clasificación por materiales

  • Cables de cobre
  • Cables de aluminio
  • Cables mixtos (incluyen hierro o aleaciones)

3. Trituración y separación

Se separa el metal del recubrimiento plástico o de goma usando maquinaria especializada (trituradoras, separadores magnéticos, separación por aire…).

4. Fundición y reutilización

  • El cobre se transforma en bobinas, cables, tuberías o componentes electrónicos.
  • El aluminio en partes de vehículos, embalajes o nuevos cables.
  • El plástico reciclado se reutiliza en mobiliario urbano, bolsas industriales o piezas técnicas.

¿Qué pasa con las bobinas de cable?

Sí, esas grandes estructuras de madera o plástico que sostienen los cables también pueden tener una nueva vida. Con un poco de imaginación pueden transformarse en mesitas auxiliares, estanterías rústicas, lámparas industriales, zapateros o revisteros.

¿Cuánto valen los cables de cobre y aluminio?

Depende. El precio de los cables de cobre y aluminio fluctúa influenciado por el valor referenciado en la Bolsa de Metales de Londres, el tipo de cable (pelado o no, cobertura plástica, calidad del metal) o de la cantidad entregada, entre otros factores.

¿De dónde provienen los cables reciclados?

De sectores como la construcción, las instalaciones industriales, las empresas de telecomunicación, la automoción o las energías renovables. Los electrodomésticos obsoletos o averiados también son una excelente fuente de cables para reciclar.

¿Dónde reciclar cables eléctricos en España?

Desde el Punto Limpio de tu ciudad, una opción ideal para particulares, hasta en tiendas de electrónicas (muchas aceptan cables al comprar nuevos dispositivos), pasando por recogidas programadas en talleres o fábricas y chatarrerías como Toferla.

¿Por qué elegir a una empresa especializada?

Reciclar cables eléctricos no es tarea para cualquiera. Necesita procesos controlados, cumplimiento normativo y, sobre todo, compromiso real.

En Toferla disponemos de contenedores para reciclaje, garantizamos la trazabilidad de los residuos y te ofrecemos asesoría personalizada para que recicles fácil y sin complicaciones.

¿Tienes dudas? Escríbenos a torrejon@chatarreriatoferla.es y te ayudamos paso a paso.


FAQs SOBRE RECICLAJE DE CABLES ELÉCTRICOS

¿Qué cables se pueden reciclar?

Todos: eléctricos, telefónicos, coaxiales, informáticos, de red, industriales…

¿Puedo tirar los cables al contenedor amarillo?

No. Deben ir al punto limpio o a una chatarrería autorizada.

¿Se puede vender el cobre o aluminio de los cables?

Sí. Si separas el metal o lo llevas entero, puedes obtener ingresos.

¿Qué pasa con el plástico del cable?

También se recicla si es de calidad. Si no, se le da una disposición final controlada.